Alejandro : Paciencia .... Con Acción

Saturday, August 06, 2005

Sócrates

"Todo lo que sé, es que no sé Nada"

Desconocemos si en verdad existió el filósofo griego, que eligió morir por la “cicuta” antes que abaratar su verdad al bajo precio del miedo a la muerte. Mas aún sin aclararlo, hemos sido herederos de sus numerosas enseñanzas, pues su discípulo Platón se ocupó de tal tarea. Si sólo fue una creación de la imaginación del dilecto discípulo o un si fue un ser “de carne y hueso” sería de mínima importancia en estos tiempos, cuando hace falta rescatar “modelos” que orienten a la humanidad, para impedir que termine por hundirse en el fango de un materialismo salvaje.
En su Apología, relata este peculiar filósofo, su extrañeza ante la noticia de haber sido declarado el hombre más sabio de toda Grecia. Viniendo este veredicto nada menos que del Oráculo de Delfos, hubo de intentar comprobar su veracidad. Puso como meta en su vida, el encontrar a un “otro”, cuyo saber superara al suyo. A partir de ese momento, comienza a aplicar la “mayéutica”, conocida hasta entonces como el arte de los partos, un método cuyo nombre es tomado por Sócrates desde la profesión de su propia madre, una partera cuya misión era traer vidas al mundo. Se trata de un interesante método de interrogación : por medio de una serie de preguntas formuladas hábilmente, el filósofo conducía a su interlocutor al descubrimiento de la verdad, lo ayudaba a extraerla de su interior. Conducido adecuadamente el interrogatorio, la verdad iba surgiendo inexorablemente. El arte mayéutica, que consiste en recuperar experiencias olvidadas, condujo a su creador, a comprobar el estado general de ignorancia, que pululaba a su alrededor. Mas, lo que produjo en él mayor impacto no fue la falta de conocimiento sino la falta de aceptación de dicho estado. Hace falta mucha sabiduría para darse cuenta de la propia ignorancia. El más destacable rasgo de la sabiduría es la capacidad para vencerse a sí mismo, así como la consecuencia de la ignorancia es ser vencido por sí mismo.
La reiterada afirmación socrática de que “nadie hace el mal a sabiendas” se corresponde con la convicción psicoanalítica, en la cual los factores inconscientes impiden el comportamiento adulto. En Sócrates, el desconocimiento del Bien determina que sea confundido con el Mal. El sujeto obra mal por ignorancia, aunque se considere capaz del saber. Hacer el Bien es saber lo que se hace ; saber es hacer lo que se sabe . La unión entre la teoría y la práctica conduce a la coherencia entre el pensamiento y la acción. Sócrates busca desconcertar a su interlocutor, enfrentarlo con su confusión, para que una vez que la haya reconocido, logre acercarse al conocimiento.
La verdad es algo a lo que debemos tender. Dar lugar a la duda, muestra una disposición hacia el saber. El espíritu conservativo busca respuesta y se satisface. El espíritu formativo está siempre en busca de la pregunta. Conocer es hallar el modo de interrogarnos en forma cada vez mejor. La mayéutica es dar a luz la verdad.
Aunque la ciencia haya avanzado y continúe en permanente búsqueda, continuamos sin poder responder a los interrogantes básicos del misterio de la vida en la Tierra.
La ciencia es una continua cancelación de errores.
Posted by Alejandro Cuevas Arriagada :: 8/06/2005 08:44:00 pm :: 3 comments